Nunca parecen importantes hasta que de repente un sudor frío te invade cuando tu equipo no arranca. Temes enfrentarte a una pérdida de los datos y no recuerdas haber hecho ninguna copia de seguridad. Tranquilo, seguramente aún estás a tiempo, sigue esta pequeña guía para mantener tus datos a raya.
Via Gumersindo Fernández